Lejos de la vida tranquila y relajada que se suele atribuir a la vejez, el estrés, la ansiedad y la depresión están muy presentes en las personas mayores. A menudo, se enfrentan a desafíos propios del envejecimiento, como problemas de salud y cambios en el estilo de vida. Por eso, encontrar formas efectivas de relajarse y reducir la tensión acumulada en sus cuerpos y mentes resulta fundamental para su bienestar físico y emocional.
Los ejercicios de relajación ayudan a aliviar el estrés, disminuir la ansiedad y promover una sensación de paz y equilibrio en la vida diaria de las personas de edad avanzada. Existe una gran variedad: desde actividades suaves, como estiramientos y ejercicios de respiración, hasta prácticas más profundas como la meditación y la relajación guiada.
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Ejercicios de respiración
Los ejercicios de respiración son el punto de partida ideal para iniciar la relajación en las personas mayores. Esta práctica ayuda a regular los latidos del corazón y promueve la calma interior. Las inspiraciones profundas, los ejercicios acostados y de pie son algunos de los ejemplos más recomendados.
Inspiraciones profundas
Es necesario comenzar por controlar y dirigir la respiración. Este ejercicio consiste en realizar inspiraciones profundas a través de la nariz, manteniendo el aire durante 5 segundos. Luego, se retiene el aliento unos 10 segundos antes de exhalar lentamente por la boca hasta vaciar completamente los pulmones.
Se recomienda repetir este proceso de 3 a 5 veces para experimentar una relajación profunda.
Ejercicios acostado
Si la persona mayor se encuentra acostada, existen ejercicios de respiración que pueden realizarse en esta posición. Comienza tumbándote boca arriba con las palmas de las manos apoyadas en la cama a la altura de la cadera. Primeramente, invita al mayor a realizar el ejercicio de respiración profunda mencionado anteriormente. Pídele que se concentre y sienta cada parte del cuerpo de forma individual. Empieza desde los dedos de los pies, pasando por los pies, las piernas, las pantorrillas, y así sucesivamente hasta llegar a la cabeza. Al finalizar, la persona se sentirá más relajada y conectada con su cuerpo.
Ejercicios de pie
Esta práctica es básica y muy común. El mayor debe ponerse de pie en una postura erguida para permitir una mejor entrada de aire en los pulmones. Luego, se le solicita que realice una inhalación profunda mientras levanta los brazos en sincronía con la respiración, llevándolos por encima de la cabeza. A medida que exhale, deberá bajar lentamente los brazos.
Este proceso puede repetirse varias veces para obtener mejores resultados.
Los ejercicios de respiración son una excelente manera de comenzar a relajarse y establecer una base sólida para otras actividades de relajación. Practicados regularmente, ayudarán a las personas mayores a gestionar el estrés, mejorar la respiración y alcanzar un estado de bienestar físico y mental.
Ejercicios de movilidad
Además de la relajación, los ejercicios de movilidad son clave para relajar los músculos y aliviar la rigidez. Algunos de ellos son las sentadillas con silla, el yoga y los estiramientos.
Sentadillas con silla
Este ejercicio simple se enfoca en la movilidad, y la respiración se une a él como un elemento crucial. Con la ayuda de una silla y una respiración controlada, el mayor puede sentarse y levantarse de la silla/sofá al ritmo de su respiración.
Esta práctica puede realizarse con los brazos estirados hacia delante, aunque, en ocasiones, podrá necesitar apoyarse para levantarse, por lo que no es imprescindible.
Yoga
El yoga combina respiración, movimiento y estiramientos en un equilibrio perfecto. Puede ser especialmente beneficioso para las personas mayores.
Realizar este ejercicio con regularidad permite mantener el cuerpo fuerte, flexible y en equilibrio. De esta manera, las personas de edad avanzada pueden sentirse más autónomas e independientes en su día a día.
Estiramientos
Los estiramientos adecuados en diferentes áreas del cuerpo pueden proporcionar múltiples ventajas. Aunque estos ejercicios pueden resultar simples, son muy efectivos, ya que ayudan a prevenir la rigidez y la atrofia muscular.
A la hora de estirar, es importante centrarse en mayor profundidad en las extremidades y en la zona de los hombros y el cuello, algunas de las partes del cuerpo donde más estrés se acumula.
Los ejercicios de movilidad brindan una excelente manera de mantener el cuerpo ágil y aliviar las tensiones acumuladas, contribuyendo a una vida activa y equilibrada para las personas mayores.
Las personas mayores deben mantenerse activas, pero también relajadas, para preservar su calidad de vida a lo largo del tiempo. Siguiendo una rutina diaria de ejercicios de relajación, se pueden prevenir problemas físicos y psicológicos.
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