Uno de los grandes retos de las personas mayores es ‘mantener en forma’ la memoria. Esta función cognitiva comienza a sufrir como parte del deterioro de nuestro cuerpo, pero también por las distintas patologías que se pueden sufrir, como pueden ser el Alzheimer y otras demencias. Hacer ejercicios que estimulen la memoria de los mayores debe ser parte de la rutina diaria, si se quiere mantener su óptimo funcionamiento. Pero, ¿cuáles son las mejores actividades y ejercicios de memoria para personas mayores?
Tener problemas de memoria suele ser una de las quejas más habituales entre las personas de mayor edad. Más del 35% de las personas mayores de 75 años aseguran sufrir de fallos de memoria, un porcentaje que se incrementa con la edad, como muestran los datos de Statista, por lo que estimular esta función es una tarea casi obligatoria.
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¿Qué es la memoria?
La memoria es un proceso mental complejo. Si bien puede definirse de forma general como el proceso mediante el cual nuestro cerebro codifica, almacena y recupera la información que recibe a través de los sentidos.
A través de la memoria podemos recordar acontecimientos, ideas, relaciones entre conceptos, sensaciones y todos los estímulos que se han experimentado a lo largo de la vida.
Es un proceso mental de gran importancia para el ser humano, porque gracias a este es posible el aprendizaje, lo que a su vez permite la adaptación al entorno, además de social.
La memoria, a nivel anatómico puede relacionarse con el hipocampo, pero también con otras áreas del cerebro como el córtex temporal, ciertas áreas del hemisferio derecho, los lóbulos frontales e incluso el cerebelo.
En cuanto a su tipología, existen la memoria sensorial (con una duración de entre los 200 y los 300 milisegundos, y es básicamente la información que recibida por los sentidos, que luego se procesa), la memoria a corto plazo (información que se retiene durante un corto periodo de tiempo) y memoria a largo plazo (datos almacenados durante largos periodos de tiempo, permitiendo el aprendizaje y recuerdos de larga data)
8 ejercicios de memoria para personas mayores
La importancia de los ejercicios de memoria en personas mayores para contribuir a frenar el deterioro cognitivo radica en la plasticidad de nuestro cerebro. Al igual que los músculos, si lo dejamos de usar, su funcionamiento se hace menos eficaz.
Son numerosos los estudios que sugieren que ciertos tipos de ejercicios y actividades para la memoria pueden ayudar a retrasar el deterioro cognitivo en las personas mayores, porque ayudan a estimular esta actividad cerebral. Especialmente es necesaria en las personas mayores, no solo por el normal deterioro que puede darse con la edad, sino porque el ritmo de las actividades y su complejidad suele disminuir (por ejemplo con la jubilación), lo que también conlleva un menor esfuerzo y estimulación del cerebro.
Es por ello que de forma proactiva es fundamental tomar medidas para realizar actividades y ejercicios para la memoria de los mayores. En líneas generales, este tipo de juegos y actividades mejora la concentración, fomenta la memoria a corto plazo (o largo según sea el caso) y el pensamiento rápido, además de contribuir a la ralentización de los síntomas de patologías como el Alzheimer y otras demencias. Las alternativas son numerosas y entretenidas, como se puede observar en la siguiente lista:
1. Leer libros
La lectura mejora la memoria verbal y la concentración. Además de fomentar la creatividad, la imaginación, la empatía y la sensación de bienestar.
2. Escribir un diario autobiográfico
Para realizar esta actividad, será necesario esforzarse en recordar episodios, acontecimientos y vivencias del pasado, lo pone a trabajar la memoria y la concentración.
3. Juegos de encontrar las parejas
Conocido precisamente como “juego de memoria”, este es un clásico para todas las edades que contribuye a mejorar la memoria a corto plazo y el pensamiento rápido.
4. Juegos de palabras
Son muchas las opciones, entre ellas grandes clásicos como los crucigramas, STOP o el conocido juego de Scrabble, además de entretenidos son ideales para mantener las habilidades lingüísticas a punto.
5. Juegos matemáticos
El popular Sudoku es uno de sus mayores exponentes, pero existen muchas otras alternativas como los juegos de cálculo. Lo mejor es que pueden adaptarse a todos los niveles.
6. Puzzles
Otra de las opciones de ejercicios de memoria para personas mayores, es la de armar un rompecabezas requiere concentración y paciencia. A mayor cantidad de piezas mayor será el desafío mental.
7. Juegos de cartas
Esta popular opción de entretenimiento es también un gran aliado de los mayores a la hora de mantener en forma la memoria. Bien sea jugando Canasta, Mus, Tute, Chinchón, la Escoba o el Cinquillo u otros como el poker y el blackjack, lo importante es que se trabaja la memoria a corto plazo y el pensamiento rápido.
8. Tocar un instrumento musical o escuchar música
Tanto el tocar un instrumento musical como la escucha activa de música, ayudan a la plasticidad cerebral y fomentan la atención y la memoria de trabajo. Además de contribuir a la agudeza mental y a mejorar el estado de ánimo entre otros muchos beneficios.
9. Bailar
Al bailar no solo se realiza actividad física, sino que también se fomenta la atención y la memoria, lo que a su vez contribuye a evitar el deterioro cognitivo. Un estudio publicado en Frontiers in Human Neuroscience ha mostrado que además de aumentar el tamaño del hipocampo en mayores y las conexiones neuronales, también mejora el equilibrio.
10. Yoga y meditación
La práctica de estas dos disciplinas ha mostrado resultados excelentes en la mejora de la memoria visual-espacial, así como la capacidad de atención.
La importancia de mantener el cerebro activo
La recompensa que se obtiene al mantener una rutina de ejercicios y actividades para la memoria es mayor de la que se puede apreciar a simple vista. Además de tratarse de actividades que suelen ser divertidas, optar por estos ejercicios para la memoria ayudará a los mayores a desarrollar nuevas interconexiones neuronales, compensando así, el deterioro natural de la memoria a corto plazo y el pensamiento rápido, pero también de otras funciones, como la capacidad de razonamiento, de resolución de problemas, de concentración, así como la comprensión lectora y la creatividad. Asimismo, contribuye a la reducción del estrés, a la socialización y a aumentar los niveles de sensación de bienestar.
