BienestarEnvejecimientoOcioRelaciones

¿Qué es el Sindrome del Jubilado?

La jubilación suele ser una decisión difícil y un proceso de adaptación que afecta a la vida del adulto mayor. La jubilación resignifica la vida del adulto mayor, especialmente cuando el ámbito laboral ha sido parte fundamental de la identidad de esa persona. El Sindrome del Jubilado hace referencia a las dificultades que puede suponer para una persona, no solamente para el adulto mayor, este proceso vital. Hace referencia a cuando ese cambio tiene repercusión en la salud mental y bienestar de la persona que lo afronta.  

En el siguiente post te explicamos qué es el síndrome del jubilado y cómo puede afectar al adulto mayor. Te contamos algunas recomendaciones que los expertos indican para poder afrontar esta situación.

En miResi sabemos que algunos cambios pueden condicionar de manera muy significativa la vida de las personas y de su entorno más cercano. Por eso te asesoramos para que, en situaciones difíciles como puede ser elegir una residencia para tu familiar, dispongas de la información que necesitas para tomar la mejor decisión.

1.  ¿Qué es el Sindrome del Jubilado?

La jubilación puede ser una decisión y una etapa vital complicada para los adultos mayores. Es una nueva situación que implica tener que cambiar varios aspectos de la vida del adulto mayor. Como sociedad hemos organizado gran parte de nuestro tiempo en torno al trabajo. Nuestra rutina y cotidianidad suelen estar estructuradas en torno a la productividad laboral y a las dinámicas sociales y económicas de esta. Por eso se hace difícil para algunos adultos mayores y cuando, finalmente llega la jubilación, ese cambio puede afectar a su salud mental e, incluso, a su salud física y bienestar.

Desde El Instituto Psicológico Claritas explican que «cuando una persona se jubila, deja atrás una rutina diaria laboral para pasar a una rutina llena de tiempo libre. Adaptarse a ello es un reto, y en algunas ocasiones se puede encontrar dificultades. Decimos que alguien atraviesa el Síndrome del Jubilado cuando no se adapta a la nueva vida que surge tras finalizar su vida laboral. Además, las personas con este síndrome experimentan síntomas físicos y emocionales como: insomnio, problemas digestivos y cardiovasculares, hipertensión, estrés o ansiedad, depresión y/o cambios en sus relaciones sociales».

La jubilación implica tener más tiempo libre que debe ser rellenado con otro estilo de vida. Uno distinto al que la personas llevaban hasta su jubilación. Un estilo de vida que no tiene por qué ser menos fructífero y del que también es importante disfrutar.

1.1.   Factores de riesgo

Siguiendo las orientaciones del Instituto Psicológico Claritas y de Itae Psicología te contamos cuáles son los factores o situaciones que pueden contribuir a sufrir el Sindrome del Jubilado:

  • Que la jubilación sea una decisión forzada o no deseada.
  • La dificultades económicas, familiares o problemas relacionadas con la salud que pueda estar atravesando la personas y que condicionan sus niveles de estrés.  
  • Que la persona experimente sentimientos y situaciones de soledad.
  • La falta de proyectos personales, de aficiones y de proactividad. La ausencia de nuevas tareas e intereses con los que ocupar el tiempo.
  • Que las personas no puedan contar con una red de apoyo social: ya sea la familia o las personas más cercanas.

1.2.   Consejos para afrontar el Sindrome del Jubilado

Desde el Instituto Psicológico Claritas también brindan una serie de consejos para ayudar a prevenir el síndrome del jubilado. Estos consejos pueden ser útiles para que el adulto mayor afronte esta nueva situación en su vida:

  • Es importante planificar la jubilación. Anticiparnos a la llegada del tiempo libre puede ayudar a que no sea tan impactante y se viva de manera gratificante.
  • Es importante conservar los lazos sociales. Continuar participando en los planes con el círculo social para evitar el aislamiento.
  • Reorienta tu vida. La jubilación puede ser un buen momento para repasar la vida y ver todo lo que se ha superado. Al ser un nuevo comienzo, es una oportunidad estupenda para plantearse nuevos retos y metas.
  • Busca actividades que fomenten tus intereses.
  • Establecer una nueva rutina en tu día en la que se dedique un tiempo a llevar a cabo experiencias que útiles y productivas.
  • Evita la autoexigencia. Es muy importante no exigirse y aceptar que es una etapa de cambio y de adaptación. Si resulta difícil, se puede seguir intentando.
La jubilación puede ser un buen momento para repasar tu vida y ver todo lo que has superado.
La jubilación puede ser un buen momento para repasar tu vida y ver todo lo que has superado

2  ¿Cómo afecta la jubilación al adulto mayor?

La jubilación implica un cambio de rol para la persona que se jubila. Muchas veces al adulto mayor le cuesta mucho aceptar este cambio en su vida y puede llegar a sufrir el Sindrome del Jubilado. ¿Por qué le cuesta aceptar el cambio? Generalmente porque ha entendido la labor que ha estado desempeñando, su trabajo, como su sello de identidad. Es como si al dejar de trabajar, al dejar de desempeñar ese rol al que se ha dedicado durante años, de alguna manera dejara de ser él mismo o ella misma.

Como indican desde Itae Psicología «la jubilación es uno de los eventos vitales que más afectan en la vida de una persona ya que de repente la persona sufre una alteración de sus rutinas diarias. Pasa de llevar una vida activa y organizada, levantándose a una hora determinada y teniendo unos objetivos al día ya marcados de forma preestablecida, a no tener ninguna obligación laboral, ningún horario marcado y pudiendo tener un excesivo tiempo libre disponible a lo largo del día». Ese cambio puede afectar en la salud mental del adulto mayor que se jubila. Por supuesto, también a aquellas personas que por otras razones tienen que prejubilarse.

2.1. Efectos psicológicos de la jubilación

Desde Cipsia Psicólogos explican que el hecho de jubilarse puede ser un factor muy estresante. Socialmente hemos establecido que el trabajo define a las personas. Esa forma de entender el trabajo repercute en la manera en la que una persona se autodefine y, por tanto, puede afectar también en su autoestima.

Cuando el adulto mayor se jubila, además de ese cambio de rol, se le suma la percepción de que está en los inicios de la vejez, lo cual puede incrementar ese momento de crisis vital. Esto forma parte de la vida de la persona y, aunque es un proceso natural, puede ser tratado con ayuda psicológica si se requiere.

Los expertos han observado que la posible pérdida de ingresos, alejarse del contexto social del trabajo y reducir las actividades diarias del mismo son factores que repercuten en el estado de ánimo y calidad de vida de las personas que se jubilan. La jubilación es un proceso muy difícil para aquellas personas que asumen que perder el trabajo es perder una parte fundamental de su vida. La sensación de «perderlo todo» aparece especialmente en las personas que no han sabido o no han podido valorar antes de la jubilación los momentos de ocio y disfrute.

La socióloga Idalia Alpízar señala que «en los casos de las personas que basan su autoestima y sus sentimientos de capacidad y valía en el trabajo, el retiro les significa alejarse de su principal fuente de apoyo emocional y de identidad. Para algunos autores, la jubilación implica replantear el concepto de sí mismo, descubrir y desarrollar nuevas facetas ya que las personas jubiladas necesitan verse a sí mismas como seres humanos más que como trabajadores». Este último punto ayudará a que el adulto mayor que pueda estar atravesando el síndrome del jubilado entienda que tiene ambiciones y cualidades que van más allá del trabajo.

2.2. Fases de adaptación de la jubilación

El gerontólogo Robert Atchley teorizó sobre un modelo de jubilación que consta de una serie de etapas de adaptación. Es un modelo orientativo porque no toda persona, tampoco en el caso de los adultos mayores, tiene por qué experimentar todas las etapas ni vivirlas de igual manera. A continuación te contamos cuáles son las fases vinculadas a la jubilación según Atchley:

2.2.1. Prejubilación

La prejubilación es una fase que está relacionada con las expectativas que una persona puede tener de la jubilación. Expectativas que pueden ser positivas o negativas. Es una fase que hace referencia a los últimos años o meses en los que la persona planifica su jubilación: por ejemplo, tiene en cuenta sus necesidades económicas y cómo se verán afectadas tras la jubilación.

La prejubilación tiene dos fases: una preparación activa que contempla el cese de la actividad laboral y la espera del mismo. Y una segunda etapa que se caracteriza por la reducción de la jornada de trabajo.  

2.2.2. Jubilación

Robert Atchley señaló tres modelos de conducta durante la etapa de jubilación: la luna de miel, la actividad continuada y el descanso. En términos generales, la luna de miel sucede cuando la jubilación se toma como una especie de vacaciones indefinidas y la persona intenta disfrutar de todos los planes que tenía pendiente. La actividad continuada significa el cambio de la rutina laboral por otra rutina diferente que incluye actividades de ocio y labores cotidianas. La fase de descanso se caracteriza por la reducción en el nivel de actividad, algo frecuente en personas que han trabajado mucho.

2.2.3. Desencanto y depresión

Tras la primera fase de jubilación pueden aparecer sentimientos de incertidumbre, decepción o de tristeza. Por ejemplo, cuando las expectativas positivas que se tenía sobre la jubilación acaban siendo una experiencia más negativa de lo que uno se imaginaba. Es una fase natural en el proceso de adaptación a esa nueva vida. 

2.2.4. Reorientación

Implica una visión más optimista de la jubilación y del cambio vital que conlleva. Tras la etapa anterior, la persona valora con una perspectiva más realista y busca una rutina más satisfactoria. Comienza a explorar nuevas experiencias.

2.2.5. Estabilidad o rutina

La persona jubilada se adapta de forma definitiva a la jubilación y establece su propia rutina. Conoce las actividades que le resultan más placenteras y la manera en la que debe enfrentarse a los cambios y dificultades que pueden ir surgiendo.

2.2.6. Finalización

La etapa final. Esta fase puede hacer referencia, por ejemplo, a cuando los adultos mayores llegan a un momento de su vida en el que empiezan a depender de otras personas.

El tiempo para adaptarse al proceso de jubilación puede ser muy diverso. Es un tiempo particular, distinto para cada persona. La duración de cada fase también puede variar. Algunos estudios han señalado que la adaptación puede lograrse en los primeros seis meses o en el primer año de jubilación, pero hay personas que han tardado más de un año en adaptarse a esa nueva condición vital.  

Aprende a dedicar el tiempo del que disponen en cultivar nuevas relaciones en la jubilación
Aprende a dedicar el tiempo del que dispones en cultivar nuevas relaciones en la jubilación

3.  Jubilación y calidad de vida en el adulto mayor

La docente en Ciencias Sociales Idalia Alpízar indica también el impacto que puede tener la jubilación en la calidad de vida de las personas. Para las personas mayores la jubilación puede significar la transición de una etapa menos activa y puede afectar a su calidad de vida.

Los expertos explican que la jubilación puede «desencadenar una serie de afecciones que puede ir en detrimento de la salud física y emocional de la persona y esto sucede porque no se ha podido dar la debido adaptación». Por tanto, es fundamental que el adulto mayor sepa adaptarse a los cambios de la jubilación, la adaptación permitirá que esa etapa de su vida sea placentera y que repercuta de manera positiva en su calidad de vida. 

Cómo señalábamos al inicio de este post, el retiro de la producción laboral significa un cambio de rol para la persona que se jubila. Un cambio en el que deja de desempeñar un papel que ha sido el que lo ha caracterizado durante gran parte de su vida. Hay personas, adultos mayores, que tras ese cese laboral pueden experimentar un vacío existencial, sentimientos de tristeza y pueden pensar incluso que ya «no valen para nada».

Algunos estereotipos en torno a la jubilación han hecho que socialmente la veamos como etapa sin productividad y, por este motivo, algunos adultos mayores han llegado a sentirse inútiles para la sociedad. Esa imagen de ellos mismos repercute negativamente en su salud mental y en su autoestima.

Muchas personas jubiladas aprenden a disfrutar de la oportunidad de compartir experiencias con su familia, con su pareja o con sus amigos. Aprenden a dedicar el tiempo del que disponen en cultivar nuevas relaciones. Sin embargo, hay jubilados y jubiladas a quienes les cuesta más compartir ese tiempo con otras personas. Cosas que antes eran sencillas se vuelven difíciles, por ejemplo, la convivencia en el hogar puede verse afectada al ser necesario instaurar una nueva rutina. Por eso es importante saber que la jubilación es un proceso de aprendizaje: hay que aprender a cómo tratar con uno mismo y con el entorno.

Afrontar la jubilación no es una tarea sencilla. Al principio para las personas que se jubilan puede ser un momento de euforia, que puede terminar en desencanto si al final no logra adaptarse a esa nueva etapa vital. Por eso es positivo cuando el tiempo disponible se usa para potenciar nuevos intereses y habilidades, en adquirir nuevas experiencias, nuevos gustos, actividad y aficiones… Lo que haría posible que este proceso fuera menos traumático para el adulto mayor.

4.  10 consejos para una jubilación satisfactoria

En un artículo sobre este cambio vital, el IMSERSO nos da las claves para una jubilación satisfactoria. El tiempo de ocio es un tiempo de libertad y durante la jubilación es posible que algunas personas deban aprender a darle otro sentido a ese tiempo y a esa libertad.

Como señala el texto es importante que las personas jubiladas reflexionen sobre su tiempo, su ocio, sus gustos, sobre lo que desean hacer y que busquen actividades y experiencias que les satisfagan, que les permitan crecer, disfrutar y seguir aprendiendo de ellos mismos.

A continuación te damos diez consejos para que puedas disfrutar de una jubilación satisfactoria. La siguientes recomendaciones han sido seleccionadas a partir de la Guía para una jubilación satisfactoria del IMSERSO:

  • Evitar el riesgo de aburrimiento y el sedentarismo al que pueden conducir el “no hacer nada”. Volver a practicar nuestras aficiones y descubrir nuevos intereses, actividades y experiencias.
  • Saber recuperar la comunicación con la familia y encontrar nuevos caminos para disfrutar junto a ellos.
  • Tener confianza en nuestras propias capacidades y abrirnos a los demás desde la base de la libertad, el respeto y la compresión.
  • Recordar que lo que las personas “creemos que somos” influye en nuestras expectativas sobre nosotros mismos y en la forma de vivir la vida. Es importante analizarnos con realismo para saber cómo nos vemos y por qué.
  • Conocerse a uno mismo para entender cómo nos afectan los cambios e identificar los rasgos de nuestra personalidad que nos dan capacidad de adaptación.
  • Contar con amistades con las que compartir alegrías, preocupaciones, intereses, y en las que encontrar apoyo cuando sea necesario. Es importante para evitar sentimientos de soledad.
  • Aceptar que aunque el trabajo sea importante en nuestra vida y nos defina como personas no es lo único que nos hace ser quienes somos.
  • Saber organizar los nuevos ingresos y aprovechar los recursos económicos.
  • Potenciar una perspectiva optimista de la realidad y de nuestro yo interior. Esto nos ayudará a aceptar las cosas que no podemos cambiar y nos dará la energía para actuar en lo que sí.
  • Aprender a encontrar los puntos positivos de las cosas en general y de nosotros mismos porque nos ayudará a sentirnos más felices y confiados.
Recomendaciones seleccionadas a partir de la Guía para una jubilación satisfactoria del IMSERSO
Recomendaciones seleccionadas a partir de la Guía para una jubilación satisfactoria del IMSERSO<br>

En miResi sabemos lo importante que es tener información que ayude a las familias a dar los mejores cuidados a su familiar. Sabemos que encontrar una residencia adaptada a las necesidades de búsqueda puede ser un proceso difícil. Podemos ayudarte a encontrar la mejor opción. No dudes en pedirnos información. Llámanos o pincha en el botón y te asesoraremos de manera gratuita.

Fuentes:

¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 1 Promedio: 5)
avatar de autor
Daniela Giraldo
Graduada en Periodismo. Redactora de contenidos en miResi. Aprendiendo cada día sobre temas de bienestar y salud que sirvan para mejorar la calidad de vida de las personas mayores.
Sobre el autor

Graduada en Periodismo. Redactora de contenidos en miResi. Aprendiendo cada día sobre temas de bienestar y salud que sirvan para mejorar la calidad de vida de las personas mayores.
¿Quieres estar al tanto de las novedades en residencias y tercera edad?
¡Suscríbete a nuestro boletín de noticias!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.