La falta de hierro en ancianos es una enfermedad muy común en la tercera edad. El paso de los años provoca ciertos cambios en nuestro organismo, algo que puede generar carencias a nivel nutricional. En miResi, queremos darte herramientas para poner fin al problema. Por eso os traemos consejos e información relevante acerca de la falta de hierro en ancianos.
Contenidos
1. Falta de hierro en ancianos, ¿Qué es y cómo aparece?
La falta de hierro es un trastorno que ocurre cuando nuestro cuerpo no almacena suficiente hierro. Esta sustancia mineral, es la que produce hemoglobina a nuestro organismo. Si no generamos suficiente hemoglobina, podemos tener falta de hierro.
La hemoglobina es una proteína que ayuda a transportar oxígeno a través de nuestro cuerpo. Si el organismo carece de la proteína, los músculos y tejidos pueden dejar de funcionar con eficiencia.
Las personas con falta de hierro, están sufriendo un déficit de oxígeno en ciertas partes de su cuerpo. En la mayoría de casos, esta carencia nutricional puede convertirse en anemia. Una patología que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), padece hasta un 30% de la población, un total de 2000 millones de personas en el mundo.
2. Importancia de detectar los síntomas de la falta de hierro
La falta de hierro puede provocar diferentes patologías que afectan a nuestra vida. Como hemos comentado antes, la falta de hierro hace que nuestros tejidos no tengan oxígeno. Esta carencia hace que los músculos y tejidos no funcionen de manera correcta.
A simple vista, la falta de hierro puede parecer una enfermedad leve. Sin embargo, esta patología puede dificultar cualquier actividad que desarrollemos. Al tener falta de hierro, hay un malestar general muy intenso.
Las enfermedades relacionadas con el déficit de hierro, pueden intensificarse y suponer un problema real para la persona. Si nuestro cuerpo no consigue almacenar suficiente hierro, tendremos ciertos efectos secundarios.
3. Principales síntomas de la falta de hierro en ancianos
Si tienes la sensación de estar padeciendo esta enfermedad, te recomendamos que te anticipes. Los síntomas de la falta de hierro en personas mayores, suelen ser relacionados con fatiga y cansancio.
En muchos casos, las personas que padecen este trastorno piensan que simplemente están cansados. El hecho de tener mayor dificultad para desarrollar actividades lo asocian a una falta de descanso, incluso a la edad.
La falta de hierro tiene síntomas fáciles de detectar, en miResi hemos querido contaros cuáles son los principales.
Como hemos citado anteriormente, el síntoma más claro de este trastorno es la fatiga y debilidad. Los ancianos con falta de hierro, acusan a la edad de este cansancio general, cuando realmente sufren de otra cosa.
Un síntoma muy común en personas con esta carencia es el dolor de cabeza. En algunos casos, las personas sufren mareos y vértigo. Estos signos de malestar son comunes en personas ancianas, por eso hay que identificar si es cosa de los años o realmente es una patología.
Las enfermedades relacionadas con la carencia de hierro, pueden dejarnos signos claros en diferentes partes del cuerpo. Si sufres alguna enfermedad de este tipo, es muy probable que te duela la lengua y sientas el tono de tu piel muy pálido.
La alimentación es un aspecto que también se ve afectado cuando sufrimos falta de hierro. Cuando no generamos hemoglobina, podemos sufrir diferentes trastornos alimentarios. Las personas con falta de hierro, pueden sentir perder el apetito de manera considerable. En algunos casos, este trastorno puede generarnos cierto hambre de alimentos poco nutritivos.
HealthLine, mostraba también que hasta un 25% de las personas con déficit de hierro tienen el síndrome de piernas inquietas.
4. ¿Cómo acabar con la falta de hierro en ancianos?
Los tratamientos para combatir contra la falta de hierro en ancianos suelen durar como mínimo seis meses. En estos, intentaremos que nuestro organismo absorba la mayor cantidad de hierro posible.
Durante los meses de tratamiento, los afectados deben consumir alimentos ricos en hierro. La mayoría de dietas para recuperar este mineral contienen cereales, vegetales, marisco y carne roja. Este tipo de alimentos pueden ser claves para recuperar ese déficit que está dañando a nuestro organismo.
Los alimentos con un alto contenido de vitamina C, pueden resultar muy complementarios para la dieta. Combinar esta vitamina con la dieta rica en hierro, puede ayudarnos a reducir el déficit de manera muy notable. Los zumos de naranja y alimentos con vitamina C son complementarios ideales para generar hemoglobina.
En miResi, trabajamos diariamente por mejorar la calidad de vida de los ancianos. Sabemos la importancia de que los seres queridos tengan una vejez feliz y saludable.
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Bibliografía:
Organización Mundial de la Salud (OMS): https://www.who.int/es/health-topics/anaemia
Go Red for Women: https://www.goredforwomen.org
Health Line: https://www.healthline.com/
