Residencias de mayores

¡Importante! Conoce los Primeros Auxilios en Residencias

El riesgo de sufrir accidentes aumenta considerablemente en la vejez, pues los mayores son más vulnerables ante la pérdida de capacidades. Desde miResi te hablamos hoy sobre el funcionamiento de los primeros auxilios en residencias para saber cómo debemos actuar y así, reducir lesiones o evitar la muerte de personas mayores.

Es importante saber que no todo el mundo está preparado para actuar ante una emergencia, y menos si no tiene los conocimientos básicos en primeros auxilios.

Las residencias de nuestra red cuentan con el material necesario y un equipo profesional capacitado para actuar con rapidez en caso de accidente.

Para estar preparado para socorrer a alguien, debemos aprender y entrenar una serie de tácticas profesionales.

Asimismo, el Servicio de Prevención y Promoción de la Salud del Instituto de Salud Pública de Madrid Salud imparte cursos destinados a la Prevención de Accidentes y Primeros Auxilios en sus Centros Madrid Salud.

1. Accidentes en personas mayores: primeros auxilios en residencias

Muchos accidentes en personas mayores se pueden prevenir. Sin embargo, otros no. Por eso, debemos estar preparados para actuar lo más rápido posible.

El método PAS (proteger, avisar y socorrer) se utiliza mucho, ya que puede salvar muchas vidas. Funciona de la siguiente manera:

  1. Proteger: conocer el estado del accidentado y mantenerlo a salvo para que no siga en riesgo.
  2. Avisar: contactar rápidamente con los servicios de emergencia para que acudan al lugar del accidente lo más rápido posible.
  3. Socorrer: aquí es donde se aplican las maniobras profesionales de primeros auxilios en ancianos para disminuir el dolor mientras llegan los servicios de emergencia.

En caso de que la persona que está socorriendo no conozca las técnicas, lo mejor será que pida ayuda cercana a otra persona del centro que sí las conozca o que, en cambio, se mantenga a la espera de una ambulancia.

Pues, su desconocimiento puede ocasionar consecuencias aún más graves.

Los primeros auxilios están pensados para ayudar, no para causar más daños.

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1.1. Caídas

Las caídas son uno de los accidentes más comunes en personas mayores

El motivo es que, debido a la edad, se produce un debilitamiento de la musculatura y de los huesos. También se pierde visión y capacidades motrices como el equilibrio, que influyen directamente en la movilidad del mayor

Estas dificultades impiden al anciano poder desempeñar las AVD (Actividades de la Vida Diaria). Comienza a sufrir gran dependencia y una vez se cae, empiezan la desconfianza e inseguridad diarias.

Una caída puede ocasionar un traumatismo craneoencefálico, una fractura de hueso o la rotura de cadera. Por eso, para trabajar en la prevención de caídas, debemos como primer paso adaptar el hogar.

Por eso mismo, en los últimos años las residencias se han convertido en un espacio seguro para nuestros mayores. Pues, disfrutan de una accesibilidad completa disminuyendo drásticamente los riesgos.

Primeros auxilios en residencias: asistencia
El personal sanitario de nuestros centros siempre está pendiente de nuestros mayores

En caso de que no se pueda prevenir y el mayor justo se haya caído, te damos algunos consejos sobre cómo levantar a una persona mayor del suelo para evitar más daños.

1.1.1. Protocolo de actuación

Veamos cómo actuar cuando un mayor se cae:

  1. Lo más importante, es mantener la calma para transmitir tranquilidad.
  1. Revisar su estado para saber si es posible ayudarlo a levantarse o no: ¿Está consciente? ¿Hay sangre?

Muchas personas mayores toman diariamente fármacos anticoagulantes como el sintrom para aliviar trastornos cardiovasculares. Por lo tanto, una lesión puede desembocar en una hemorragia bastante grave.

En caso de que esté consciente pero presente daños como el sangrado, debemos actuar de inmediato:

  1. Colocar una almohada o manta bajo la cabeza del afectado con mucho cuidado.
  1. Pregúntale si tiene algún dolor y examina si puede girar la cabeza o doblar brazos y piernas. Para que nos hagamos una idea: “Casi un 75% de las caídas conllevan lesiones en las extremidades o en los hombros”, según Mejor con Salud.
  1. Si tiene dolor, es muy importante no levantarlo y controlar sus constantes vitales, además de mantener las extremidades inmóviles.
  1. En caso de encontrar alguna lesión, no debemos moverlo, pero sí llamar enseguida al servicio de urgencias.

En caso de que esté consciente, pero sin dolor ni sangrado, procederemos a ayudarlo a levantarse sin tirar de sus brazos:

  1. Primero, acercarle a un sitio estable como por ejemplo, una silla.
  2. Segundo, girarlo sobre un costado.
  3. Tercero, colocar su cuerpo boca abajo con las rodillas y los codos apoyados.
  4. Le ayudamos a incorporarse muy despacio: nos colocamos detrás para dar seguridad y apoyamos sus manos en la silla hasta que suba por completo.

En caso de que esté inconsciente (ha perdido el conocimiento o le cuesta bastante respirar), debemos llamar con carácter urgente al 112 para que vengan cuanto antes.

Sin embargo, muchas residencias ya cuentan con médico propio con cobertura diaria las 24 horas y de no ser así, suelen estar cerca de los centros de salud correspondientes.

Una vez haya pasado el peligro, el accidentado debe pasar consulta diaria con su médico de la residencia para que le examinen completamente. Así, se descubre si hay alguna secuela física o interna.

1.2. Atragantamiento en ancianos

Las personas mayores, a medida que envejecen, comienzan a experimentar problemas a la hora de tragar por la falta de dientes o la propia edad, entre otras causas. A esto se le conoce como disfagia.

Comienzan a ser cada vez más dependientes, sobre todo a la hora de comer. Pues, tienen demasiada facilidad para toser cada vez que ingieren algo, ya que el alimento se puede extraviar y derivar en las vías respiratorias, desencadenando un episodio de asfixia en el mayor.

Por eso, debemos trabajar en su prevención mediante el cuidado del entorno, la postura, la presentación de los alimentos y el acto de deglución.

Esto se trabaja muy bien en las residencias que forman parte de la red de miResi. Pues, muchas cuentan con el apoyo de logopedas y terapeutas ocupacionales que trabajan sobre el aprendizaje de la deglución en el mayor con disfagia.

1.2.1. Protocolo de actuación

En caso de atragantamiento con tos, debemos actuar de la siguiente forma:

  • Si el mayor tose, es una buena señal. Está intentando expulsar el objeto o alimento que le ha obstruido las vías respiratorias, por lo que no des palmadas en su espalda ni en su pecho.

En caso de atragantamiento y asfixia, podemos hacer dos cosas:

  • Dar con el objeto que está obstaculizando las vías y si es posible, sacarlo con nuestras propias manos. Sin embargo, esta acción solo la pueden realizar aquellos profesionales que estén muy seguros de que pueden extraer el objeto porque es muy peligroso.
  • Si no es posible: maniobra de Heimlich.
1.2.1.1. Maniobra de Heimlich

La maniobra de Heimlich o compresión abdominal es una técnica salva vidas que se utiliza en caso de atragantamiento en ancianos.

El mayor presenta una obstrucción de la tráquea por algún alimento u objeto que se haya extraviado. Por lo tanto, hay que despejar las vías respiratorias.

Una vez transcurridos 4 minutos sin que llegue oxígeno a los pulmones, el riesgo de daño cerebral o la propia muerte se incrementa exponencialmente. 

Entonces, debemos actuar de forma rápida haciendo lo siguiente:

  1. Colócate justo detrás del mayor.
  1. Pon un puño en el abdomen (concretamente en la boca del estómago).
  1. Tapa el puño con la mano sobrante y haz presión hacia el centro del abdomen y hacia arriba con bastante fuerza hasta que el mayor eleve suavemente los pies del suelo. Repite esta acción al menos 5 veces hasta que el obstáculo sea expulsado por completo.

En caso de haber perdido el conocimiento:

  1. Coloca las palmas de las manos en la boca del estómago, situando una mano sobre la otra y presionando mediante el peso de tu cuerpo.
  2. Cuando el afectado haya recuperado el conocimiento o la respiración, debe ser atendido por un médico de inmediato.
Primeros auxilios en residencias: maniobra de Heimlich
La maniobra de Heimlich ha salvado muchas vidas evitando la asfixia en ancianos

1.3. Desmayos

Muchas veces, los mayores sufren mareos al ponerse de pie muy rápido, ya que disminuye el flujo del cerebro al mismo tiempo que la presión arterial.

Esto puede desembocar en un desmayo: un accidente muy peligroso porque al perder el conocimiento, el mayor se desploma y puede sufrir golpes muy graves, incluso mortales.

1.3.1. Protocolo de actuación

¿Cómo debemos actuar si un residente se ha desmayado?

  1. Primero, debemos asegurarnos de su estado: ¿Tiene heridas o sangre?
  2. Luego, colocamos al mayor boca arriba manteniendo su cabeza ladeada para impedir que se ahogue con la lengua y subimos sus piernas para que la sangre vuelva al cerebro.
  3. Una vez haya vuelto en sí, debe ser atendido por el médico de la residencia o por el servicio de urgencias del hospital más cercano.

1.4. Infarto cardíaco o accidente cerebrovascular

El infarto cardíaco o el accidente cerebrovascular también ponen en riesgo la vida del anciano. Por ello, debemos actuar con rapidez para que las consecuencias sean lo menos graves posibles.

El infarto cardíaco se produce por una obstrucción en los vasos sanguíneos y lo suelen sufrir aquellos mayores que presentan problemas cardiovasculares. En cambio, el ictus es producido por una falta de riego sanguíneo hacia el cerebro.

Por ello, es muy importante que las residencias conozcan el historial médico completo del paciente para saber actuar de inmediato y de la forma correcta.

Muchas de las residencias que forman parte de nuestra red, son también centros especializados en la rehabilitación del ictus con la participación de logopedas, terapeutas ocupacionales y fisioterapeutas.

1.4.1. Protocolo de actuación

Si un residente sufre alguno de estos dos accidentes, te explicamos a continuación cómo actuar:

  1. Primero, el personal sanitario debe llamar de inmediato al médico de urgencia.
  1. Segundo, controlamos el pulso y las respiraciones. Si es necesario, ponemos en práctica la técnica cardio respiratoria.
  1. Tercero, acomodamos a la persona mayor boca arriba, comprobando que no hay ningún obstáculo para que pueda respirar bien.
  1. Cuarto, colocamos el mentón del mayor hacia arriba para abrir las vías respiratorias, abrimos su boca y tapando su nariz con nuestra mano, inhalamos aire y colocamos nuestros labios sobre los del accidentado. Después, exhalamos el aire hasta que el pecho se hinche. Esta acción deberá repetirse 2 veces.
  2. Quinto, procederemos a realizar un masaje cardíaco: colocamos la palma de nuestra mano en su esternón y la otra posada encima, extendemos nuestros brazos y hacemos 30 compresiones.
  3. Finalmente, combinamos las dos técnicas (2 insuflaciones y 30 compresiones) hasta que el anciano recobre el conocimiento o llegue la ayuda médica.
  4. Se procede a desfibrilar.

2. miResi quiere ayudarte con sus primeros auxilios en residencias

Si notas que tu mayor está perdiendo cada vez más rápido sus capacidades motoras, sufre disfagia, tiene presión arterial alta o padece problemas cardiovasculares, puede estar en riesgo de sufrir alguno de estos accidentes.

En miResi solo trabajamos con las mejores residencias de España. Te recomendamos enormemente plantearte el ingreso de tu mayor en uno de nuestros centros

Los profesionales de los centros de miResi (enfermeros y auxiliares) están formados en primeros auxilios. Además, cuentan con el material sanitario necesario para solventar cualquier accidente al momento.

Además, la mayoría ofrecen servicio médico interno y servicio de enfermería. Por lo que a excepción de los casos graves, la mayor parte de las emergencias pueden solucionarse en la propia residencia.

Primeros auxilios en residencias: asistencia
El personal se vuelca por completo en la asistencia inmediata del residente mayor

Si estás interesado en encontrar los mejores cuidados para tu mayor, contacta con nuestro equipo de asesoramiento. Queremos ayudarte a mejorar la calidad de vida de tu familiar de forma personalizada, gratuita y sin ningún tipo de compromiso 💚

Fuentes:

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Maria Álvarez
Graduada en Comunicación Publicitaria y ahora redactora en miResi. Desde que tiene uso de razón, adora escribir. Cree en el valor humano a la hora de contar historias. Especialista en redacción sobre salud mental en mayores.
Sobre el autor

Graduada en Comunicación Publicitaria y ahora redactora en miResi. Desde que tiene uso de razón, adora escribir. Cree en el valor humano a la hora de contar historias. Especialista en redacción sobre salud mental en mayores.
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